El origen de la Sábana Santa , el manto que cubrió el cuerpo de Jesús y que quedó impregnado con su rostro durante los tres días que estuvo enterrado antes de la Resurrección, ha sido objeto de estudio desde su descubrimiento. Las dudas sobre su veracidad han derivado en infinidad de reportes, análisis y teorías que, más o menos ciertas, han envuelto al Síndone en un halo de misterio sobre el que la Iglesia Católica ha tenido que responder muchas veces. Ahora es el propio custodio pontificio de la Sábana, el cardenal Roberto Repole , el último en replicar.Y es que el cardenal de la catedral de Turín no considera lo suficientemente riguroso el artículo ‘Formación de la imagen en la Sábana Santa: un enfoque digital 3D’ , firmado por Cicero Moraes y publicado en la revista Archaeometry. En él, el autor asegura que la formación de la imagen se realizó a través de la superposición de un bajorrelieve en época medieval sobre el tejido cuya impregnación se realizó gracias al calor y no hubo contacto con ningún humano.Monseñor Repole se apoya en las conclusiones del Centro Internacional de Estudios sobre la Síndone, que refuta dicha teoría usando otros estudios «físicos y químicos» que en el pasado ya han descartado el origen pictórico de la reliquia —que sea un dibujo o una suerte de cuadro— o el contacto con un bajorrelieve —un calco—. El cardenal ha mostrado su «preocupación por la superficialidad de ciertas conclusiones, que a menudo no resisten a un examen más detenido del trabajo presentado» y pide «no perder nunca de vista la necesaria atención crítica ante lo que se publica con tanta facilidad».Noticias relacionadas estandar Si Sábanas Santas en España: un viaje en busca de las telas sagradas FRAN CONTRERAS estandar No El obispo de Jaén presenta «The Mystery Man», una experiencia inmersiva sobre la Sábana Santa Marta NegrilloLa teoría de la Máscara de AgamenónCicero Moraes llevó a cabo una simulación digital en la que creó modelos 3D de un cuerpo humano y de un bajorrelieve, utilizando software de código abierto y técnicas de simulación física para analizar cómo una tela entra en contacto con distintas superficies . A partir de estos experimentos, plantea la hipótesis de que la imagen de la Sábana Santa podría haberse formado a partir de un bajorrelieve medieval modelado con herramientas tridimensionales.Según sus conclusiones, los puntos de contacto entre la tela y un bajorrelieve producen una imagen con menos distorsión que los generados por un cuerpo tridimensional. Este último genera lo que se conoce como el «efecto de deformación de la Máscara de Agamenón» , un fenómeno bien documentado desde el descubrimiento de este objeto por parte de Heinrich Schliemann en 1876.El Centro Internacional de Estudios de la Síndone señala que, como ya mostraron las teorías previas sobre la Sábana de Vignon y Delage en 1902 , la imagen se comporta como una proyección ortogonal. De hecho, en el propio artículo se confirma precisamente esta observación, por lo que el cardenal Repole se reafirma en que este estudio no representa un hallazgo novedoso. El Centro, por tanto, insiste en la necesidad de mantener un enfoque riguroso e interdisciplinar, capaz de distinguir con claridad entre datos comprobados e hipótesis , y que integre los resultados procedentes de todas las disciplinas implicadas. En este sentido, apunta a que los modelos digitales como los empleados en este artículo pueden ser útiles para la reflexión, pero no sustituyen el análisis físico-químico directo de la reliquia. El origen de la Sábana Santa , el manto que cubrió el cuerpo de Jesús y que quedó impregnado con su rostro durante los tres días que estuvo enterrado antes de la Resurrección, ha sido objeto de estudio desde su descubrimiento. Las dudas sobre su veracidad han derivado en infinidad de reportes, análisis y teorías que, más o menos ciertas, han envuelto al Síndone en un halo de misterio sobre el que la Iglesia Católica ha tenido que responder muchas veces. Ahora es el propio custodio pontificio de la Sábana, el cardenal Roberto Repole , el último en replicar.Y es que el cardenal de la catedral de Turín no considera lo suficientemente riguroso el artículo ‘Formación de la imagen en la Sábana Santa: un enfoque digital 3D’ , firmado por Cicero Moraes y publicado en la revista Archaeometry. En él, el autor asegura que la formación de la imagen se realizó a través de la superposición de un bajorrelieve en época medieval sobre el tejido cuya impregnación se realizó gracias al calor y no hubo contacto con ningún humano.Monseñor Repole se apoya en las conclusiones del Centro Internacional de Estudios sobre la Síndone, que refuta dicha teoría usando otros estudios «físicos y químicos» que en el pasado ya han descartado el origen pictórico de la reliquia —que sea un dibujo o una suerte de cuadro— o el contacto con un bajorrelieve —un calco—. El cardenal ha mostrado su «preocupación por la superficialidad de ciertas conclusiones, que a menudo no resisten a un examen más detenido del trabajo presentado» y pide «no perder nunca de vista la necesaria atención crítica ante lo que se publica con tanta facilidad».Noticias relacionadas estandar Si Sábanas Santas en España: un viaje en busca de las telas sagradas FRAN CONTRERAS estandar No El obispo de Jaén presenta «The Mystery Man», una experiencia inmersiva sobre la Sábana Santa Marta NegrilloLa teoría de la Máscara de AgamenónCicero Moraes llevó a cabo una simulación digital en la que creó modelos 3D de un cuerpo humano y de un bajorrelieve, utilizando software de código abierto y técnicas de simulación física para analizar cómo una tela entra en contacto con distintas superficies . A partir de estos experimentos, plantea la hipótesis de que la imagen de la Sábana Santa podría haberse formado a partir de un bajorrelieve medieval modelado con herramientas tridimensionales.Según sus conclusiones, los puntos de contacto entre la tela y un bajorrelieve producen una imagen con menos distorsión que los generados por un cuerpo tridimensional. Este último genera lo que se conoce como el «efecto de deformación de la Máscara de Agamenón» , un fenómeno bien documentado desde el descubrimiento de este objeto por parte de Heinrich Schliemann en 1876.El Centro Internacional de Estudios de la Síndone señala que, como ya mostraron las teorías previas sobre la Sábana de Vignon y Delage en 1902 , la imagen se comporta como una proyección ortogonal. De hecho, en el propio artículo se confirma precisamente esta observación, por lo que el cardenal Repole se reafirma en que este estudio no representa un hallazgo novedoso. El Centro, por tanto, insiste en la necesidad de mantener un enfoque riguroso e interdisciplinar, capaz de distinguir con claridad entre datos comprobados e hipótesis , y que integre los resultados procedentes de todas las disciplinas implicadas. En este sentido, apunta a que los modelos digitales como los empleados en este artículo pueden ser útiles para la reflexión, pero no sustituyen el análisis físico-químico directo de la reliquia. El origen de la Sábana Santa , el manto que cubrió el cuerpo de Jesús y que quedó impregnado con su rostro durante los tres días que estuvo enterrado antes de la Resurrección, ha sido objeto de estudio desde su descubrimiento. Las dudas sobre su veracidad han derivado en infinidad de reportes, análisis y teorías que, más o menos ciertas, han envuelto al Síndone en un halo de misterio sobre el que la Iglesia Católica ha tenido que responder muchas veces. Ahora es el propio custodio pontificio de la Sábana, el cardenal Roberto Repole , el último en replicar.Y es que el cardenal de la catedral de Turín no considera lo suficientemente riguroso el artículo ‘Formación de la imagen en la Sábana Santa: un enfoque digital 3D’ , firmado por Cicero Moraes y publicado en la revista Archaeometry. En él, el autor asegura que la formación de la imagen se realizó a través de la superposición de un bajorrelieve en época medieval sobre el tejido cuya impregnación se realizó gracias al calor y no hubo contacto con ningún humano.Monseñor Repole se apoya en las conclusiones del Centro Internacional de Estudios sobre la Síndone, que refuta dicha teoría usando otros estudios «físicos y químicos» que en el pasado ya han descartado el origen pictórico de la reliquia —que sea un dibujo o una suerte de cuadro— o el contacto con un bajorrelieve —un calco—. El cardenal ha mostrado su «preocupación por la superficialidad de ciertas conclusiones, que a menudo no resisten a un examen más detenido del trabajo presentado» y pide «no perder nunca de vista la necesaria atención crítica ante lo que se publica con tanta facilidad».Noticias relacionadas estandar Si Sábanas Santas en España: un viaje en busca de las telas sagradas FRAN CONTRERAS estandar No El obispo de Jaén presenta «The Mystery Man», una experiencia inmersiva sobre la Sábana Santa Marta NegrilloLa teoría de la Máscara de AgamenónCicero Moraes llevó a cabo una simulación digital en la que creó modelos 3D de un cuerpo humano y de un bajorrelieve, utilizando software de código abierto y técnicas de simulación física para analizar cómo una tela entra en contacto con distintas superficies . A partir de estos experimentos, plantea la hipótesis de que la imagen de la Sábana Santa podría haberse formado a partir de un bajorrelieve medieval modelado con herramientas tridimensionales.Según sus conclusiones, los puntos de contacto entre la tela y un bajorrelieve producen una imagen con menos distorsión que los generados por un cuerpo tridimensional. Este último genera lo que se conoce como el «efecto de deformación de la Máscara de Agamenón» , un fenómeno bien documentado desde el descubrimiento de este objeto por parte de Heinrich Schliemann en 1876.El Centro Internacional de Estudios de la Síndone señala que, como ya mostraron las teorías previas sobre la Sábana de Vignon y Delage en 1902 , la imagen se comporta como una proyección ortogonal. De hecho, en el propio artículo se confirma precisamente esta observación, por lo que el cardenal Repole se reafirma en que este estudio no representa un hallazgo novedoso. El Centro, por tanto, insiste en la necesidad de mantener un enfoque riguroso e interdisciplinar, capaz de distinguir con claridad entre datos comprobados e hipótesis , y que integre los resultados procedentes de todas las disciplinas implicadas. En este sentido, apunta a que los modelos digitales como los empleados en este artículo pueden ser útiles para la reflexión, pero no sustituyen el análisis físico-químico directo de la reliquia. RSS de noticias de sociedad
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