Es la portería del Real Madrid un remanso de paz en el que Courtois acumula siete temporadas como encargado indiscutible de la protección de las redes del Bernabéu. Pero no hace tanto esta demarcación era un foco de conflicto y debate recurrente entre la parroquia blanca. La condición de indiscutible de la que gozó Casillas durante más de una década llegó a su fin en 2013, en la última temporada de Mourinho en el banquillo merengue, una decisión que desencadenó una inestabilidad que se mantuvo en la meta madridista durante dos años y medio. Hasta que un fax enviado a destiempo en uno de los episodios más surrealistas en la centenaria historia del club frustró el fichaje de De Gea . Una jornada que sacó los colores al Madrid, aunque a la postre puso fin al debate en la portería al convertirse Keylor Navas, por entonces con las maletas hechas rumbo a Mánchester, en el titular.Noticias relacionadas estandar Si QUÉ FICHAJE AQUEL DE… Jonathan Woodgate, el traspaso del inglés cojo Rubén Cañizares estandar Si QUÉ FICHAJE AQUEL EL DE… Alonso y Ferrari, no fue para toda la vida José Carlos CarabiasLa alternancia que instauró Mourinho entre Casillas y Diego López se mantuvo con Ancelotti durante la temporada 2013-14, que concluyó con la conquista de la ansiada décima Champions. Tras la marcha del lucense, el técnico italiano confió la titularidad en el de Móstoles, en la que además sería su última campaña en el Bernabéu poniendo fin a una trayectoria de 16 años. Lo que, ya con Benítez en el banquillo, dejó al costarricense como único candidato a defender la portería y llevó a la entidad presidida por Florentino Pérez a sondear el mercado en busca de una mejor opción. El elegido fue De Gea , canterano del Atlético de Madrid que acumulaba cuatro temporadas en Old Trafford. Su relación con Van Gaal distaba mucho de ser la ideal, por lo que el madrileño pronto estuvo convencido de la idea de regresar a la capital española.Quien no estaba tan convencido de dejar salir a su portero titular era el Manchester United, y menos por una cantidad que consideraran insuficiente. Por ello, el Madrid se topó con un muro a la hora de negociar hasta el 31 de agosto, día en el que se cerraba el mercado de fichajes y en el que la entidad mancuniana accedió a abordar la operación, en la que se incluyó a Keylor para efectuar un intercambio entre el español y el costarricense. Conscientes de que el contrato del meta español llegaba a su fin al término de la temporada, los ingleses aceptaron una cantidad de traspaso cercana a los 30 millones de euros.Sin embargo, una vez puestos de acuerdo ambos clubes, se toparon con la negativa del costarricense a abandonar el Bernabéu. Las horas pasaban y la presión del fin del mercado que estaba al caer se cernía sobre las oficinas madridistas. Poco antes de la medianoche, hora límite para cerrar movimientos, Keylor asumió que su rol en Madrid sería de suplente y terminó por aceptar la oferta del United, en la que su salario se vería duplicado. Con todas las partes al fin convenidas, tocaba proceder con la burocracia necesaria para dar parte de la operación. Los papeles del contrato del tico se hicieron de rogar por parte del United, pero finalmente llegaron casi a la medianoche. Procedió el Madrid entonces a remitir a LaLiga el papeleo para inscribir a De Gea, pero ya era demasiado tarde. Cuando la competición recibió el fax con el contrato del madrileño, el reloj marcaba las 00.30 y el mercado de fichajes había quedado cerrado. Ambas operaciones se vieron frustradas tras un desenlace surrealista, impropio de un club como el blanco, aunque con final feliz para ellos con Keylor como portero titular de su trienio glorioso por Europa. Es la portería del Real Madrid un remanso de paz en el que Courtois acumula siete temporadas como encargado indiscutible de la protección de las redes del Bernabéu. Pero no hace tanto esta demarcación era un foco de conflicto y debate recurrente entre la parroquia blanca. La condición de indiscutible de la que gozó Casillas durante más de una década llegó a su fin en 2013, en la última temporada de Mourinho en el banquillo merengue, una decisión que desencadenó una inestabilidad que se mantuvo en la meta madridista durante dos años y medio. Hasta que un fax enviado a destiempo en uno de los episodios más surrealistas en la centenaria historia del club frustró el fichaje de De Gea . Una jornada que sacó los colores al Madrid, aunque a la postre puso fin al debate en la portería al convertirse Keylor Navas, por entonces con las maletas hechas rumbo a Mánchester, en el titular.Noticias relacionadas estandar Si QUÉ FICHAJE AQUEL DE… Jonathan Woodgate, el traspaso del inglés cojo Rubén Cañizares estandar Si QUÉ FICHAJE AQUEL EL DE… Alonso y Ferrari, no fue para toda la vida José Carlos CarabiasLa alternancia que instauró Mourinho entre Casillas y Diego López se mantuvo con Ancelotti durante la temporada 2013-14, que concluyó con la conquista de la ansiada décima Champions. Tras la marcha del lucense, el técnico italiano confió la titularidad en el de Móstoles, en la que además sería su última campaña en el Bernabéu poniendo fin a una trayectoria de 16 años. Lo que, ya con Benítez en el banquillo, dejó al costarricense como único candidato a defender la portería y llevó a la entidad presidida por Florentino Pérez a sondear el mercado en busca de una mejor opción. El elegido fue De Gea , canterano del Atlético de Madrid que acumulaba cuatro temporadas en Old Trafford. Su relación con Van Gaal distaba mucho de ser la ideal, por lo que el madrileño pronto estuvo convencido de la idea de regresar a la capital española.Quien no estaba tan convencido de dejar salir a su portero titular era el Manchester United, y menos por una cantidad que consideraran insuficiente. Por ello, el Madrid se topó con un muro a la hora de negociar hasta el 31 de agosto, día en el que se cerraba el mercado de fichajes y en el que la entidad mancuniana accedió a abordar la operación, en la que se incluyó a Keylor para efectuar un intercambio entre el español y el costarricense. Conscientes de que el contrato del meta español llegaba a su fin al término de la temporada, los ingleses aceptaron una cantidad de traspaso cercana a los 30 millones de euros.Sin embargo, una vez puestos de acuerdo ambos clubes, se toparon con la negativa del costarricense a abandonar el Bernabéu. Las horas pasaban y la presión del fin del mercado que estaba al caer se cernía sobre las oficinas madridistas. Poco antes de la medianoche, hora límite para cerrar movimientos, Keylor asumió que su rol en Madrid sería de suplente y terminó por aceptar la oferta del United, en la que su salario se vería duplicado. Con todas las partes al fin convenidas, tocaba proceder con la burocracia necesaria para dar parte de la operación. Los papeles del contrato del tico se hicieron de rogar por parte del United, pero finalmente llegaron casi a la medianoche. Procedió el Madrid entonces a remitir a LaLiga el papeleo para inscribir a De Gea, pero ya era demasiado tarde. Cuando la competición recibió el fax con el contrato del madrileño, el reloj marcaba las 00.30 y el mercado de fichajes había quedado cerrado. Ambas operaciones se vieron frustradas tras un desenlace surrealista, impropio de un club como el blanco, aunque con final feliz para ellos con Keylor como portero titular de su trienio glorioso por Europa. Es la portería del Real Madrid un remanso de paz en el que Courtois acumula siete temporadas como encargado indiscutible de la protección de las redes del Bernabéu. Pero no hace tanto esta demarcación era un foco de conflicto y debate recurrente entre la parroquia blanca. La condición de indiscutible de la que gozó Casillas durante más de una década llegó a su fin en 2013, en la última temporada de Mourinho en el banquillo merengue, una decisión que desencadenó una inestabilidad que se mantuvo en la meta madridista durante dos años y medio. Hasta que un fax enviado a destiempo en uno de los episodios más surrealistas en la centenaria historia del club frustró el fichaje de De Gea . Una jornada que sacó los colores al Madrid, aunque a la postre puso fin al debate en la portería al convertirse Keylor Navas, por entonces con las maletas hechas rumbo a Mánchester, en el titular.Noticias relacionadas estandar Si QUÉ FICHAJE AQUEL DE… Jonathan Woodgate, el traspaso del inglés cojo Rubén Cañizares estandar Si QUÉ FICHAJE AQUEL EL DE… Alonso y Ferrari, no fue para toda la vida José Carlos CarabiasLa alternancia que instauró Mourinho entre Casillas y Diego López se mantuvo con Ancelotti durante la temporada 2013-14, que concluyó con la conquista de la ansiada décima Champions. Tras la marcha del lucense, el técnico italiano confió la titularidad en el de Móstoles, en la que además sería su última campaña en el Bernabéu poniendo fin a una trayectoria de 16 años. Lo que, ya con Benítez en el banquillo, dejó al costarricense como único candidato a defender la portería y llevó a la entidad presidida por Florentino Pérez a sondear el mercado en busca de una mejor opción. El elegido fue De Gea , canterano del Atlético de Madrid que acumulaba cuatro temporadas en Old Trafford. Su relación con Van Gaal distaba mucho de ser la ideal, por lo que el madrileño pronto estuvo convencido de la idea de regresar a la capital española.Quien no estaba tan convencido de dejar salir a su portero titular era el Manchester United, y menos por una cantidad que consideraran insuficiente. Por ello, el Madrid se topó con un muro a la hora de negociar hasta el 31 de agosto, día en el que se cerraba el mercado de fichajes y en el que la entidad mancuniana accedió a abordar la operación, en la que se incluyó a Keylor para efectuar un intercambio entre el español y el costarricense. Conscientes de que el contrato del meta español llegaba a su fin al término de la temporada, los ingleses aceptaron una cantidad de traspaso cercana a los 30 millones de euros.Sin embargo, una vez puestos de acuerdo ambos clubes, se toparon con la negativa del costarricense a abandonar el Bernabéu. Las horas pasaban y la presión del fin del mercado que estaba al caer se cernía sobre las oficinas madridistas. Poco antes de la medianoche, hora límite para cerrar movimientos, Keylor asumió que su rol en Madrid sería de suplente y terminó por aceptar la oferta del United, en la que su salario se vería duplicado. Con todas las partes al fin convenidas, tocaba proceder con la burocracia necesaria para dar parte de la operación. Los papeles del contrato del tico se hicieron de rogar por parte del United, pero finalmente llegaron casi a la medianoche. Procedió el Madrid entonces a remitir a LaLiga el papeleo para inscribir a De Gea, pero ya era demasiado tarde. Cuando la competición recibió el fax con el contrato del madrileño, el reloj marcaba las 00.30 y el mercado de fichajes había quedado cerrado. Ambas operaciones se vieron frustradas tras un desenlace surrealista, impropio de un club como el blanco, aunque con final feliz para ellos con Keylor como portero titular de su trienio glorioso por Europa. RSS de noticias de deportes
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