El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha instado este lunes al área de Medio Ambiente a estudiar «rápido» la instalación de toldos, carpas o cualquier elemento de sombra en el intercambiador de Cuatro Vientos, un nudo esencial de transporte durante las obras de la A-5 que utilizan cada día unas 20.000 personas, destacó Borja Carabante, titular del área. El regidor ha explicado en declaraciones a los medios tras la inauguración del centro deportivo Cerro Almodóvar, en Villa de Vallecas, que «no se puede esperar mucho más». La necesidad de dar algo de alivio térmico a los viajeros surgió hace una semana en la Comisión de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, en la que Carabante admitió, tras un ruego de Vox, que estudiarán la posible instalación de marquesinas o algunas estructura similar para dar sombra y un respiro de las altas temperaturas tanto a los viajeros como a los trabajadores. De hecho, insitió en que las propuestas deben analizarlas los servicios técnicos de EMT Madrid junto con los del Consorcio Regional de Transportes. Ignacio Ansaldo, portavoz de Vox, defendió que «urge» contar con algo de sombra en esta zona para evitar golpes de calor e insolaciones, ya que allí se juntan «25 líneas de autobuses, entre urbanos e interurbanos». «La escasez de marquesinas para asumir este crecimiento del tráfico en el intercambiador ha hecho que durante el invierno y la primavera los usuarios hayan tenido que sufrir las lluvias durante sus esperas para coger el autobús, algunas de hasta 30 minutos, y ahora con la llegada del verano y las altas temperaturas que sufre Madrid, acompañadas con el efecto multiplicador del asfalto, ha provocado situaciones de alta tensión entre los usuarios e incluso con los conductores de la EMT al tener que hacer uso de los baños al terminar su recorrido pues no dejan entrar al autobús mientras van al baño», ha descrito el edil de Vox.BañosAnsaldo ha explicado que no están pidiendo al área que instalen marquesinas refrescantes como las instaladas en Pavones y Villaverde pero sí, al menos, «que se ponga una estructura de toldos o carpas a lo largo de los dos sentidos de la A-5». «En menos de un mes podrían estar instaladas. Su sombra reduciría al mínimo los conflictos y los usuarios podrían esperar los autobuses sin golpes de calor o insolaciones», ha defendido.Vox, por último, ha planteado la ampliación del número de baños portátiles, fuentes de agua y dotar las instalaciones de bancos para que los viajeros puedan sentarse mientras esperan.Las obras de la A-5, anunció el alcalde la pasada semana, avanzan a buen ritmo, y se espera que los trabajos en superficie (y sus afecciones al tráfico) concluyan a finales de 2026. Además, el alcalde anunció hace unos meses que la segunda parte del soterramiento de la A-5, que se pondrá en marcha en la próxima legislatura, abarcará los 700 metros que exigían los vecinos hasta la conexión de la autovía con la M-40. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha instado este lunes al área de Medio Ambiente a estudiar «rápido» la instalación de toldos, carpas o cualquier elemento de sombra en el intercambiador de Cuatro Vientos, un nudo esencial de transporte durante las obras de la A-5 que utilizan cada día unas 20.000 personas, destacó Borja Carabante, titular del área. El regidor ha explicado en declaraciones a los medios tras la inauguración del centro deportivo Cerro Almodóvar, en Villa de Vallecas, que «no se puede esperar mucho más». La necesidad de dar algo de alivio térmico a los viajeros surgió hace una semana en la Comisión de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, en la que Carabante admitió, tras un ruego de Vox, que estudiarán la posible instalación de marquesinas o algunas estructura similar para dar sombra y un respiro de las altas temperaturas tanto a los viajeros como a los trabajadores. De hecho, insitió en que las propuestas deben analizarlas los servicios técnicos de EMT Madrid junto con los del Consorcio Regional de Transportes. Ignacio Ansaldo, portavoz de Vox, defendió que «urge» contar con algo de sombra en esta zona para evitar golpes de calor e insolaciones, ya que allí se juntan «25 líneas de autobuses, entre urbanos e interurbanos». «La escasez de marquesinas para asumir este crecimiento del tráfico en el intercambiador ha hecho que durante el invierno y la primavera los usuarios hayan tenido que sufrir las lluvias durante sus esperas para coger el autobús, algunas de hasta 30 minutos, y ahora con la llegada del verano y las altas temperaturas que sufre Madrid, acompañadas con el efecto multiplicador del asfalto, ha provocado situaciones de alta tensión entre los usuarios e incluso con los conductores de la EMT al tener que hacer uso de los baños al terminar su recorrido pues no dejan entrar al autobús mientras van al baño», ha descrito el edil de Vox.BañosAnsaldo ha explicado que no están pidiendo al área que instalen marquesinas refrescantes como las instaladas en Pavones y Villaverde pero sí, al menos, «que se ponga una estructura de toldos o carpas a lo largo de los dos sentidos de la A-5». «En menos de un mes podrían estar instaladas. Su sombra reduciría al mínimo los conflictos y los usuarios podrían esperar los autobuses sin golpes de calor o insolaciones», ha defendido.Vox, por último, ha planteado la ampliación del número de baños portátiles, fuentes de agua y dotar las instalaciones de bancos para que los viajeros puedan sentarse mientras esperan.Las obras de la A-5, anunció el alcalde la pasada semana, avanzan a buen ritmo, y se espera que los trabajos en superficie (y sus afecciones al tráfico) concluyan a finales de 2026. Además, el alcalde anunció hace unos meses que la segunda parte del soterramiento de la A-5, que se pondrá en marcha en la próxima legislatura, abarcará los 700 metros que exigían los vecinos hasta la conexión de la autovía con la M-40. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha instado este lunes al área de Medio Ambiente a estudiar «rápido» la instalación de toldos, carpas o cualquier elemento de sombra en el intercambiador de Cuatro Vientos, un nudo esencial de transporte durante las obras de la A-5 que utilizan cada día unas 20.000 personas, destacó Borja Carabante, titular del área. El regidor ha explicado en declaraciones a los medios tras la inauguración del centro deportivo Cerro Almodóvar, en Villa de Vallecas, que «no se puede esperar mucho más». La necesidad de dar algo de alivio térmico a los viajeros surgió hace una semana en la Comisión de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, en la que Carabante admitió, tras un ruego de Vox, que estudiarán la posible instalación de marquesinas o algunas estructura similar para dar sombra y un respiro de las altas temperaturas tanto a los viajeros como a los trabajadores. De hecho, insitió en que las propuestas deben analizarlas los servicios técnicos de EMT Madrid junto con los del Consorcio Regional de Transportes. Ignacio Ansaldo, portavoz de Vox, defendió que «urge» contar con algo de sombra en esta zona para evitar golpes de calor e insolaciones, ya que allí se juntan «25 líneas de autobuses, entre urbanos e interurbanos». «La escasez de marquesinas para asumir este crecimiento del tráfico en el intercambiador ha hecho que durante el invierno y la primavera los usuarios hayan tenido que sufrir las lluvias durante sus esperas para coger el autobús, algunas de hasta 30 minutos, y ahora con la llegada del verano y las altas temperaturas que sufre Madrid, acompañadas con el efecto multiplicador del asfalto, ha provocado situaciones de alta tensión entre los usuarios e incluso con los conductores de la EMT al tener que hacer uso de los baños al terminar su recorrido pues no dejan entrar al autobús mientras van al baño», ha descrito el edil de Vox.BañosAnsaldo ha explicado que no están pidiendo al área que instalen marquesinas refrescantes como las instaladas en Pavones y Villaverde pero sí, al menos, «que se ponga una estructura de toldos o carpas a lo largo de los dos sentidos de la A-5». «En menos de un mes podrían estar instaladas. Su sombra reduciría al mínimo los conflictos y los usuarios podrían esperar los autobuses sin golpes de calor o insolaciones», ha defendido.Vox, por último, ha planteado la ampliación del número de baños portátiles, fuentes de agua y dotar las instalaciones de bancos para que los viajeros puedan sentarse mientras esperan.Las obras de la A-5, anunció el alcalde la pasada semana, avanzan a buen ritmo, y se espera que los trabajos en superficie (y sus afecciones al tráfico) concluyan a finales de 2026. Además, el alcalde anunció hace unos meses que la segunda parte del soterramiento de la A-5, que se pondrá en marcha en la próxima legislatura, abarcará los 700 metros que exigían los vecinos hasta la conexión de la autovía con la M-40. RSS de noticias de espana
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