<p>Hace 90 años, en una familia de agricultores de trigo sarraceno y cebada en la actual provincia china de Qinghai, nació un niño llamado <strong>Lhamo Dhondup</strong>. Cuando tenía dos años, un grupo de monjes budistas tibetanos se presentaron en su casa. Explicaron a los padres que, durante la momificación del <strong>decimotercer Dalai Lama</strong> en Lhasa, capital del Tíbet, la cabeza del difunto <strong>giró de repente mirando hacia el noreste</strong>, apuntando en la dirección donde se encontraría su reencarnación.</p>
Una organización sin fines de lucro será quien reconozca al bebé que lo suceda. Fuera de China, según ha insistido el líder espiritual
<p>Hace 90 años, en una familia de agricultores de trigo sarraceno y cebada en la actual provincia china de Qinghai, nació un niño llamado <strong>Lhamo Dhondup</strong>. Cuando tenía dos años, un grupo de monjes budistas tibetanos se presentaron en su casa. Explicaron a los padres que, durante la momificación del <strong>decimotercer Dalai Lama</strong> en Lhasa, capital del Tíbet, la cabeza del difunto <strong>giró de repente mirando hacia el noreste</strong>, apuntando en la dirección donde se encontraría su reencarnación.</p>
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