La empresa Ferapi , de Riesa, una acería de Sajonia que fabrica barras de acero, paró su producción ayer, jueves, y envió a sus trabajadores a casa. El motivo fue que los precio de la electricidad alcanzaban niveles tan absurdos que, se mirase como se mirase, se estaba produciendo a pérdidas. El megavatio hora se cobraba ayer, entre las 17:00 y las 18:00 horas, a 936 euros en Alemania , debido fundamentalmente, según el Ministerio de Economía y Protección del Clima, a una combinación de oscuridad, bajos niveles de viento y un fuerte aumento del consumo, un fenómeno denominado por la burocracia de Berlín ‘calma oscura’. «A mi bisabuelo le pasaba lo mismo, venía el mal tiempo, se llevaba la cosecha y ese año lo pasaban mal en casa», ironizaba uno de los obreros mientras inauguraba el inesperado fin de semana de tres días, para añadir: «Lo increíble es que sigamos viviendo así en pleno siglo XXI y en este sector; si esto sigue así, habrá cierres y despidos, como los está habiendo en otros sectores, y por eso tenemos mucho miedo». Noticia Relacionada estandar No El Bundesbank empeora sus previsiones para Alemania y anticipa una recesión por segundo año consecutivo ABC El banco central augura una caída del PIB del 0,2% en 2024, para regresar a crecimiento en 2025El 54% de la energía en Alemania procede de fuentes renovables sujetas a estos vaivenes y hoy, viernes, se vuelve a generar poca electricidad. Entre las 8 y las 9 de la mañana, Alemania importó alrededor de 14 gigavatios hora con un consumo de casi 65 gigavatios hora. El precio de la electricidad está al cierre de este artículo en 253 euros. El vicecanciller y ministro de Economía, Robert Habeck, ha salido a tranquilizar a la población y asegurar que «el suministro está garantizado», pero todo el que puede apaga las luces y desenchufa los aparatos por temor a la factura. Para el sábado se prevén precios de «sólo» 101 euros el megavatio hora gracias a que la baja presión ‘Yara’ producirá algo de viento, después de los precios pico de hasta mil euros esta semana.Noruega, afectadaLa vecina Noruega también se ve afectada por los altos precios de la electricidad y está reconsiderando sus exportaciones a Alemania y Europa en general. El Partido del Centro, el socio de coalición más pequeño en el Gobierno noruego, así como el Partido del Progreso, que actualmente lidera las encuestas, exigen que se renegocien los vínculos existentes con Alemania y Gran Bretaña. El ministro de Energía noruego, Terje Aasland, describe la situación como «absolutamente de mierda». Los precios en el sur de Noruega alcanzan su nivel más alto desde 2009, casi 20 veces más que la semana anterior el viernes. Olav Botnen, experto en el mercado eléctrico noruego de Volt Power Analytics, explica que Noruega tiene problemas para mantener las centrales hidroeléctricas porque tiene que exportar una cantidad relativamente grande de electricidad a Alemania. El diseño de la expansión de los cables eléctricos al extranjero, en su momento, no tuvo en cuenta la posibilidad de tal escasez de energía y el sistema vive pendiente del parte meteorológico. Si Noruega redujese o incluso detuviese sus exportaciones de electricidad, esta decisión afectaría gravemente a todo el norte de Europa y el asunto está en la agenda de la UE. Noruega es también el mayor productor de petróleo de Europa occidental y ha sustituido a Rusia como el mayor proveedor de gas para muchos países de la UE.El problema alemán tiene también conexiones diplomáticas con Suecia. La ministra sueca de Energía, Ebba Busch, ha declarado que está «enfadada con los alemanes». Alemania y Suecia están conectadas mediante un interconector relativamente pequeño, el ‘Baltic Connector’ (600 MW). Los precios de la electricidad en Suecia están determinados por factores internos como la producción local, la demanda y la infraestructura, pero también factores externos como la demanda internacional, los precios del gas y los certificados de emisiones de CO2. En tiempos de poco viento, Alemania importa electricidad de Suecia, que se genera allí a partir de energía hidroeléctrica, y causa un aumento adicional de los precios. «Han tomado una decisión para su propia zona y tienen derecho a tomarla. Pero esa decisión ha tenido consecuencias muy granves para nosotros», se queja Busch, que subraya que la competitividad alemana ha disminuido considerablemente y esto afecta a toda la UE. En su opinión, un funcionamiento continuo de las centrales nucleares habría tenido efectos positivos para toda Europa, ya que se habría aumentado la capacidad de transmisión de electricidad desde Alemania a otras zonas, lo que habría reducido los precios para todos. El 54% de la energía en Alemania procede de fuentes renovables sujetas a vaivenes climáticosBusch pide ahora que Alemania introduzca una zona especial de precios de la electricidad en el norte. Esto abarataría la electricidad en la región y, por extensión, en Suecia. «El sistema energético alemán no está en orden», afirma Busch. El sur de Alemania, sin embargo, se resiste a esta introducción,La ‘calma oscura’ no es un incidente aislado, no al menos en esta época del año. En las últimas semanas, los precios de la electricidad en Alemania han sido inusualmente altos en repetidas ocasiones. En los días con poca radiación solar y viento, la producción eléctrica no alcanza para cubrir la demanda a precios habituales. Se importa electricidad del extranjero porque suele ser más barata que la producida en las centrales eléctricas de carbón de Alemania. El director de la fábrica de Riesa, Uwe Reinecke , reconoce que, «debido a los altos precios de la electricidad en el mercado spot, hemos tenido que parar varias veces este año nuestra producción en la acería de Feralpi Stahl en Riesa» y calcula que sólo los paros de esta semana han causado costes de seis ceros. «Durante estas fases paramos la producción para protegernos de pérdidas aún mayores. Esto se produce claramente a expensas de la eficiencia y la rentabilidad», explica, y se lamenta: «No estamos alcanzando nuestros objetivos de producción anuales». La empresa Ferapi , de Riesa, una acería de Sajonia que fabrica barras de acero, paró su producción ayer, jueves, y envió a sus trabajadores a casa. El motivo fue que los precio de la electricidad alcanzaban niveles tan absurdos que, se mirase como se mirase, se estaba produciendo a pérdidas. El megavatio hora se cobraba ayer, entre las 17:00 y las 18:00 horas, a 936 euros en Alemania , debido fundamentalmente, según el Ministerio de Economía y Protección del Clima, a una combinación de oscuridad, bajos niveles de viento y un fuerte aumento del consumo, un fenómeno denominado por la burocracia de Berlín ‘calma oscura’. «A mi bisabuelo le pasaba lo mismo, venía el mal tiempo, se llevaba la cosecha y ese año lo pasaban mal en casa», ironizaba uno de los obreros mientras inauguraba el inesperado fin de semana de tres días, para añadir: «Lo increíble es que sigamos viviendo así en pleno siglo XXI y en este sector; si esto sigue así, habrá cierres y despidos, como los está habiendo en otros sectores, y por eso tenemos mucho miedo». Noticia Relacionada estandar No El Bundesbank empeora sus previsiones para Alemania y anticipa una recesión por segundo año consecutivo ABC El banco central augura una caída del PIB del 0,2% en 2024, para regresar a crecimiento en 2025El 54% de la energía en Alemania procede de fuentes renovables sujetas a estos vaivenes y hoy, viernes, se vuelve a generar poca electricidad. Entre las 8 y las 9 de la mañana, Alemania importó alrededor de 14 gigavatios hora con un consumo de casi 65 gigavatios hora. El precio de la electricidad está al cierre de este artículo en 253 euros. El vicecanciller y ministro de Economía, Robert Habeck, ha salido a tranquilizar a la población y asegurar que «el suministro está garantizado», pero todo el que puede apaga las luces y desenchufa los aparatos por temor a la factura. Para el sábado se prevén precios de «sólo» 101 euros el megavatio hora gracias a que la baja presión ‘Yara’ producirá algo de viento, después de los precios pico de hasta mil euros esta semana.Noruega, afectadaLa vecina Noruega también se ve afectada por los altos precios de la electricidad y está reconsiderando sus exportaciones a Alemania y Europa en general. El Partido del Centro, el socio de coalición más pequeño en el Gobierno noruego, así como el Partido del Progreso, que actualmente lidera las encuestas, exigen que se renegocien los vínculos existentes con Alemania y Gran Bretaña. El ministro de Energía noruego, Terje Aasland, describe la situación como «absolutamente de mierda». Los precios en el sur de Noruega alcanzan su nivel más alto desde 2009, casi 20 veces más que la semana anterior el viernes. Olav Botnen, experto en el mercado eléctrico noruego de Volt Power Analytics, explica que Noruega tiene problemas para mantener las centrales hidroeléctricas porque tiene que exportar una cantidad relativamente grande de electricidad a Alemania. El diseño de la expansión de los cables eléctricos al extranjero, en su momento, no tuvo en cuenta la posibilidad de tal escasez de energía y el sistema vive pendiente del parte meteorológico. Si Noruega redujese o incluso detuviese sus exportaciones de electricidad, esta decisión afectaría gravemente a todo el norte de Europa y el asunto está en la agenda de la UE. Noruega es también el mayor productor de petróleo de Europa occidental y ha sustituido a Rusia como el mayor proveedor de gas para muchos países de la UE.El problema alemán tiene también conexiones diplomáticas con Suecia. La ministra sueca de Energía, Ebba Busch, ha declarado que está «enfadada con los alemanes». Alemania y Suecia están conectadas mediante un interconector relativamente pequeño, el ‘Baltic Connector’ (600 MW). Los precios de la electricidad en Suecia están determinados por factores internos como la producción local, la demanda y la infraestructura, pero también factores externos como la demanda internacional, los precios del gas y los certificados de emisiones de CO2. En tiempos de poco viento, Alemania importa electricidad de Suecia, que se genera allí a partir de energía hidroeléctrica, y causa un aumento adicional de los precios. «Han tomado una decisión para su propia zona y tienen derecho a tomarla. Pero esa decisión ha tenido consecuencias muy granves para nosotros», se queja Busch, que subraya que la competitividad alemana ha disminuido considerablemente y esto afecta a toda la UE. En su opinión, un funcionamiento continuo de las centrales nucleares habría tenido efectos positivos para toda Europa, ya que se habría aumentado la capacidad de transmisión de electricidad desde Alemania a otras zonas, lo que habría reducido los precios para todos. El 54% de la energía en Alemania procede de fuentes renovables sujetas a vaivenes climáticosBusch pide ahora que Alemania introduzca una zona especial de precios de la electricidad en el norte. Esto abarataría la electricidad en la región y, por extensión, en Suecia. «El sistema energético alemán no está en orden», afirma Busch. El sur de Alemania, sin embargo, se resiste a esta introducción,La ‘calma oscura’ no es un incidente aislado, no al menos en esta época del año. En las últimas semanas, los precios de la electricidad en Alemania han sido inusualmente altos en repetidas ocasiones. En los días con poca radiación solar y viento, la producción eléctrica no alcanza para cubrir la demanda a precios habituales. Se importa electricidad del extranjero porque suele ser más barata que la producida en las centrales eléctricas de carbón de Alemania. El director de la fábrica de Riesa, Uwe Reinecke , reconoce que, «debido a los altos precios de la electricidad en el mercado spot, hemos tenido que parar varias veces este año nuestra producción en la acería de Feralpi Stahl en Riesa» y calcula que sólo los paros de esta semana han causado costes de seis ceros. «Durante estas fases paramos la producción para protegernos de pérdidas aún mayores. Esto se produce claramente a expensas de la eficiencia y la rentabilidad», explica, y se lamenta: «No estamos alcanzando nuestros objetivos de producción anuales». La empresa Ferapi , de Riesa, una acería de Sajonia que fabrica barras de acero, paró su producción ayer, jueves, y envió a sus trabajadores a casa. El motivo fue que los precio de la electricidad alcanzaban niveles tan absurdos que, se mirase como se mirase, se estaba produciendo a pérdidas. El megavatio hora se cobraba ayer, entre las 17:00 y las 18:00 horas, a 936 euros en Alemania , debido fundamentalmente, según el Ministerio de Economía y Protección del Clima, a una combinación de oscuridad, bajos niveles de viento y un fuerte aumento del consumo, un fenómeno denominado por la burocracia de Berlín ‘calma oscura’. «A mi bisabuelo le pasaba lo mismo, venía el mal tiempo, se llevaba la cosecha y ese año lo pasaban mal en casa», ironizaba uno de los obreros mientras inauguraba el inesperado fin de semana de tres días, para añadir: «Lo increíble es que sigamos viviendo así en pleno siglo XXI y en este sector; si esto sigue así, habrá cierres y despidos, como los está habiendo en otros sectores, y por eso tenemos mucho miedo». Noticia Relacionada estandar No El Bundesbank empeora sus previsiones para Alemania y anticipa una recesión por segundo año consecutivo ABC El banco central augura una caída del PIB del 0,2% en 2024, para regresar a crecimiento en 2025El 54% de la energía en Alemania procede de fuentes renovables sujetas a estos vaivenes y hoy, viernes, se vuelve a generar poca electricidad. Entre las 8 y las 9 de la mañana, Alemania importó alrededor de 14 gigavatios hora con un consumo de casi 65 gigavatios hora. El precio de la electricidad está al cierre de este artículo en 253 euros. El vicecanciller y ministro de Economía, Robert Habeck, ha salido a tranquilizar a la población y asegurar que «el suministro está garantizado», pero todo el que puede apaga las luces y desenchufa los aparatos por temor a la factura. Para el sábado se prevén precios de «sólo» 101 euros el megavatio hora gracias a que la baja presión ‘Yara’ producirá algo de viento, después de los precios pico de hasta mil euros esta semana.Noruega, afectadaLa vecina Noruega también se ve afectada por los altos precios de la electricidad y está reconsiderando sus exportaciones a Alemania y Europa en general. El Partido del Centro, el socio de coalición más pequeño en el Gobierno noruego, así como el Partido del Progreso, que actualmente lidera las encuestas, exigen que se renegocien los vínculos existentes con Alemania y Gran Bretaña. El ministro de Energía noruego, Terje Aasland, describe la situación como «absolutamente de mierda». Los precios en el sur de Noruega alcanzan su nivel más alto desde 2009, casi 20 veces más que la semana anterior el viernes. Olav Botnen, experto en el mercado eléctrico noruego de Volt Power Analytics, explica que Noruega tiene problemas para mantener las centrales hidroeléctricas porque tiene que exportar una cantidad relativamente grande de electricidad a Alemania. El diseño de la expansión de los cables eléctricos al extranjero, en su momento, no tuvo en cuenta la posibilidad de tal escasez de energía y el sistema vive pendiente del parte meteorológico. Si Noruega redujese o incluso detuviese sus exportaciones de electricidad, esta decisión afectaría gravemente a todo el norte de Europa y el asunto está en la agenda de la UE. Noruega es también el mayor productor de petróleo de Europa occidental y ha sustituido a Rusia como el mayor proveedor de gas para muchos países de la UE.El problema alemán tiene también conexiones diplomáticas con Suecia. La ministra sueca de Energía, Ebba Busch, ha declarado que está «enfadada con los alemanes». Alemania y Suecia están conectadas mediante un interconector relativamente pequeño, el ‘Baltic Connector’ (600 MW). Los precios de la electricidad en Suecia están determinados por factores internos como la producción local, la demanda y la infraestructura, pero también factores externos como la demanda internacional, los precios del gas y los certificados de emisiones de CO2. En tiempos de poco viento, Alemania importa electricidad de Suecia, que se genera allí a partir de energía hidroeléctrica, y causa un aumento adicional de los precios. «Han tomado una decisión para su propia zona y tienen derecho a tomarla. Pero esa decisión ha tenido consecuencias muy granves para nosotros», se queja Busch, que subraya que la competitividad alemana ha disminuido considerablemente y esto afecta a toda la UE. En su opinión, un funcionamiento continuo de las centrales nucleares habría tenido efectos positivos para toda Europa, ya que se habría aumentado la capacidad de transmisión de electricidad desde Alemania a otras zonas, lo que habría reducido los precios para todos. El 54% de la energía en Alemania procede de fuentes renovables sujetas a vaivenes climáticosBusch pide ahora que Alemania introduzca una zona especial de precios de la electricidad en el norte. Esto abarataría la electricidad en la región y, por extensión, en Suecia. «El sistema energético alemán no está en orden», afirma Busch. El sur de Alemania, sin embargo, se resiste a esta introducción,La ‘calma oscura’ no es un incidente aislado, no al menos en esta época del año. En las últimas semanas, los precios de la electricidad en Alemania han sido inusualmente altos en repetidas ocasiones. En los días con poca radiación solar y viento, la producción eléctrica no alcanza para cubrir la demanda a precios habituales. Se importa electricidad del extranjero porque suele ser más barata que la producida en las centrales eléctricas de carbón de Alemania. El director de la fábrica de Riesa, Uwe Reinecke , reconoce que, «debido a los altos precios de la electricidad en el mercado spot, hemos tenido que parar varias veces este año nuestra producción en la acería de Feralpi Stahl en Riesa» y calcula que sólo los paros de esta semana han causado costes de seis ceros. «Durante estas fases paramos la producción para protegernos de pérdidas aún mayores. Esto se produce claramente a expensas de la eficiencia y la rentabilidad», explica, y se lamenta: «No estamos alcanzando nuestros objetivos de producción anuales». RSS de noticias de economia
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