España completó el viernes ante Italia en el Stadion Wankdorf de Berna la mejor primera fase de grupos de su historia en la Eurocopa. Por primera vez, la selección firmó el pleno al ganar los tres partidos. En los dos primeros, ante Portugal y Bélgica, bordó el fútbol, pero la victoria sin brillo contra las transalpinas en el tercero volvió a dejar la sensación de que a la Roja —el único combinado que tiene una posesión superior al 70% y el que más tiros ha realizado (75, 26 a puerta) en el torneo— los rivales le generan ocasiones con muy poco. El equipo volvió a sufrir en los contraataques y en el balón parado, las dos asignaturas pendientes del grupo dirigido por Montse Tomé. Al término del encuentro, Patri Guijarro, que se llevó el MVP, reconoció que a España le está costando más de la cuenta ajustarse para evitar que el rival corra a la espalda de sus defensas: “Intentamos hundirlas, intentamos tener el balón en su campo, y es normal que en transiciones intenten pillarnos. Somos conscientes de que tenemos que tener vigilancias, estar hablándonos todo el rato, incluso defender con balón, porque sabemos que es un punto débil. Las rivales también son buenas, pero lo importante es que lo analizamos e intentamos mejorar”.
La selección española es la que más posesión acumula y más ocasiones de gol genera de toda la Euro, pero se ha mostrado frágil en defensa tras encajar en 12 de los últimos 14 partidos
España completó el viernes ante Italia en el Stadion Wankdorf de Berna la mejor primera fase de grupos de su historia en la Eurocopa. Por primera vez, la selección firmó el pleno al ganar los tres partidos. En los dos primeros, ante Portugal y Bélgica, bordó el fútbol, pero la victoria sin brillo contra las transalpinas en el tercero volvió a dejar la sensación de que a la Roja —el único combinado que tiene una posesión superior al 70% y el que más tiros ha realizado (75, 26 a puerta) en el torneo— los rivales le generan ocasiones con muy poco. El equipo volvió a sufrir en los contraataques y en el balón parado, las dos asignaturas pendientes del grupo dirigido por Montse Tomé. Al término del encuentro, Patri Guijarro, que se llevó el MVP, reconoció que a España le está costando más de la cuenta ajustarse para evitar que el rival corra a la espalda de sus defensas: “Intentamos hundirlas, intentamos tener el balón en su campo, y es normal que en transiciones intenten pillarnos. Somos conscientes de que tenemos que tener vigilancias, estar hablándonos todo el rato, incluso defender con balón, porque sabemos que es un punto débil. Las rivales también son buenas, pero lo importante es que lo analizamos e intentamos mejorar”.
Feed MRSS-S Noticias