Con palabras más o menos gruesas según el que las formulara pero coincidencia generalizada el rechazo al acuerdo ‘sorpresa’ alcanzado entre la Unión Europea y Estados Unidos para fijar unos aranceles del 15 por ciento -no en todos los sectores- a los productos que lleguen desde el ‘viejo continente’ al país liderado en la actualidad por Donald Trump. Si el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, reconoció estar «muy» preocupado por los efectos de este pacto, el líder de la oposición, Carlos Martínez, lo consideró que «estará cargado de obligaciones», mientras que las organizaciones agrarias echaron pestes sobre la firma del mismo.Antes, fue la consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, la que se pronunció sobre este asunto al lamentar que la paralización de la «escalada comercial» entre Estados Unidos y Europa se haya debido al establecimiento de un arancel fijo del 15 por ciento sobre los productos fabricados en la UE, lo que supone una «carga» y una «traba más» al tejido empresarial de Castilla y León, informa Ical.García recordó que desde el Gobierno autonómico se prepararon desde el primer momento que se anunciaron los posibles aranceles con la puesta a disposición del tejido productivo de distintos mecanismos, que se centran, en mayor medida, en la apertura de nuevos mercados para «favorecer la productividad».Señaló que el objetivo es incidir en la «competitividad» de las empresas para que «puedan paliar de alguna forma» el arancel acordado, razón por la que la consejera recalcó que la Junta «continuará al lado» de las empresas de la Comunidad.Después, y durante el encuentro que reunión al PSCL con las organizaciones agrarias para mostrar su rechazo por el cambio en la Política Agraria Común (PAC) planteada desde Europa, Martínez rechazaba la posición arancelaria «unilateral» suscrita este pasado fin de semana y sospechaba que la «letra pequeña estará cargada de obligaciones y muy poquitos derechos» suscribiendo las palabras que había escuchado por la mañana en boca del gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá: «Hay que leer mucho y muy despacio la letra pequeña», señaló. Al respecto, y según las declaraciones recogidas por Ical, «se conocen los grandes titulares, del matón de colegio, que nos conformamos que nos dé cinco golpes porque nos iba a dar diez», pero aseguró que «no gusta nada ese 15 por ciento. Es una imposición y no podemos estar a favor», dijo.En todo caso, expuso que «llueve sobre mojado», porque a la reducción del presupuesto comunitario, el aumento en armas y energía, ahora se suma que la «UE está perdiendo su peso específico».Noticia Relacionada estandar No Las reacciones al acuerdo de EE.UU. con la Unión Europea claudia t. ferrero El gobernador del Banco de España prevé un efecto «moderado» de los aranceles en nuestro país, pero teme las cláusulas del pacto comercialPor su parte, las cuatro organizaciones agrarias no dudaron en rechazar con palabras gruesas el acuerdo. Así, el presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, recordó que la Comunidad exporta productos agroalimentarios al país norteamericano por valor de 150 millones de euros, qu e a partir de ahora «pagarán 22,5 millones al Gobierno de Trump por estos aranceles. Y mientras, lo que viene aquí, ¿cuánto pagará? ¿cero? Además, son de peor calidad y entrarán a bajo precio porque no tiene ningún impuesto». «Nosotros le habíamos pedido a Von der Leyen que no aceptara aranceles, y si los había, que se actuara con la misma contundencia. Solo es fuerte con los débiles, los agricultores y ganaderos», criticó.En la misma línea, el coordinador de la UCCL, Jesús Manuel González Palacín, recordó que Europa «lleva más de 25 años desmantelando las políticas proteccionistas» y consideró que «no podemos ir al son que toque Estados Unidos. Europa debe definir su política y saber con qué reglas de juego jugamos. Es algo más serio que decidirlo entre hoyo y hoyo en un campo de golf», afeó en referencia a que el acuerdo se suscribió en el campo de golf escocés propiedad de Trump.El secretario autonómico de UPA, Aurelio González, por su parte, advirtió del «alto peligro» que tienen estos aranceles, porque vaticinó que «se bajarán más los precios». Por último, el coordinar de COAG, Lorenzo Rivera, invitó a los grupos parlamentarios en Bruselas a «parar esto y el acuerdo Mercosur». Consideró asimismo que este acuerdo «da la razón al tonto de la política, que se aprovecha -añadió- de dos guerras». Al respecto, expuso que «el amigo americano ahora mismo es el enemigo. Trump se ha salido con la suya». Con palabras más o menos gruesas según el que las formulara pero coincidencia generalizada el rechazo al acuerdo ‘sorpresa’ alcanzado entre la Unión Europea y Estados Unidos para fijar unos aranceles del 15 por ciento -no en todos los sectores- a los productos que lleguen desde el ‘viejo continente’ al país liderado en la actualidad por Donald Trump. Si el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, reconoció estar «muy» preocupado por los efectos de este pacto, el líder de la oposición, Carlos Martínez, lo consideró que «estará cargado de obligaciones», mientras que las organizaciones agrarias echaron pestes sobre la firma del mismo.Antes, fue la consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, la que se pronunció sobre este asunto al lamentar que la paralización de la «escalada comercial» entre Estados Unidos y Europa se haya debido al establecimiento de un arancel fijo del 15 por ciento sobre los productos fabricados en la UE, lo que supone una «carga» y una «traba más» al tejido empresarial de Castilla y León, informa Ical.García recordó que desde el Gobierno autonómico se prepararon desde el primer momento que se anunciaron los posibles aranceles con la puesta a disposición del tejido productivo de distintos mecanismos, que se centran, en mayor medida, en la apertura de nuevos mercados para «favorecer la productividad».Señaló que el objetivo es incidir en la «competitividad» de las empresas para que «puedan paliar de alguna forma» el arancel acordado, razón por la que la consejera recalcó que la Junta «continuará al lado» de las empresas de la Comunidad.Después, y durante el encuentro que reunión al PSCL con las organizaciones agrarias para mostrar su rechazo por el cambio en la Política Agraria Común (PAC) planteada desde Europa, Martínez rechazaba la posición arancelaria «unilateral» suscrita este pasado fin de semana y sospechaba que la «letra pequeña estará cargada de obligaciones y muy poquitos derechos» suscribiendo las palabras que había escuchado por la mañana en boca del gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá: «Hay que leer mucho y muy despacio la letra pequeña», señaló. Al respecto, y según las declaraciones recogidas por Ical, «se conocen los grandes titulares, del matón de colegio, que nos conformamos que nos dé cinco golpes porque nos iba a dar diez», pero aseguró que «no gusta nada ese 15 por ciento. Es una imposición y no podemos estar a favor», dijo.En todo caso, expuso que «llueve sobre mojado», porque a la reducción del presupuesto comunitario, el aumento en armas y energía, ahora se suma que la «UE está perdiendo su peso específico».Noticia Relacionada estandar No Las reacciones al acuerdo de EE.UU. con la Unión Europea claudia t. ferrero El gobernador del Banco de España prevé un efecto «moderado» de los aranceles en nuestro país, pero teme las cláusulas del pacto comercialPor su parte, las cuatro organizaciones agrarias no dudaron en rechazar con palabras gruesas el acuerdo. Así, el presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, recordó que la Comunidad exporta productos agroalimentarios al país norteamericano por valor de 150 millones de euros, qu e a partir de ahora «pagarán 22,5 millones al Gobierno de Trump por estos aranceles. Y mientras, lo que viene aquí, ¿cuánto pagará? ¿cero? Además, son de peor calidad y entrarán a bajo precio porque no tiene ningún impuesto». «Nosotros le habíamos pedido a Von der Leyen que no aceptara aranceles, y si los había, que se actuara con la misma contundencia. Solo es fuerte con los débiles, los agricultores y ganaderos», criticó.En la misma línea, el coordinador de la UCCL, Jesús Manuel González Palacín, recordó que Europa «lleva más de 25 años desmantelando las políticas proteccionistas» y consideró que «no podemos ir al son que toque Estados Unidos. Europa debe definir su política y saber con qué reglas de juego jugamos. Es algo más serio que decidirlo entre hoyo y hoyo en un campo de golf», afeó en referencia a que el acuerdo se suscribió en el campo de golf escocés propiedad de Trump.El secretario autonómico de UPA, Aurelio González, por su parte, advirtió del «alto peligro» que tienen estos aranceles, porque vaticinó que «se bajarán más los precios». Por último, el coordinar de COAG, Lorenzo Rivera, invitó a los grupos parlamentarios en Bruselas a «parar esto y el acuerdo Mercosur». Consideró asimismo que este acuerdo «da la razón al tonto de la política, que se aprovecha -añadió- de dos guerras». Al respecto, expuso que «el amigo americano ahora mismo es el enemigo. Trump se ha salido con la suya». Con palabras más o menos gruesas según el que las formulara pero coincidencia generalizada el rechazo al acuerdo ‘sorpresa’ alcanzado entre la Unión Europea y Estados Unidos para fijar unos aranceles del 15 por ciento -no en todos los sectores- a los productos que lleguen desde el ‘viejo continente’ al país liderado en la actualidad por Donald Trump. Si el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, reconoció estar «muy» preocupado por los efectos de este pacto, el líder de la oposición, Carlos Martínez, lo consideró que «estará cargado de obligaciones», mientras que las organizaciones agrarias echaron pestes sobre la firma del mismo.Antes, fue la consejera de Industria, Comercio y Empleo, Leticia García, la que se pronunció sobre este asunto al lamentar que la paralización de la «escalada comercial» entre Estados Unidos y Europa se haya debido al establecimiento de un arancel fijo del 15 por ciento sobre los productos fabricados en la UE, lo que supone una «carga» y una «traba más» al tejido empresarial de Castilla y León, informa Ical.García recordó que desde el Gobierno autonómico se prepararon desde el primer momento que se anunciaron los posibles aranceles con la puesta a disposición del tejido productivo de distintos mecanismos, que se centran, en mayor medida, en la apertura de nuevos mercados para «favorecer la productividad».Señaló que el objetivo es incidir en la «competitividad» de las empresas para que «puedan paliar de alguna forma» el arancel acordado, razón por la que la consejera recalcó que la Junta «continuará al lado» de las empresas de la Comunidad.Después, y durante el encuentro que reunión al PSCL con las organizaciones agrarias para mostrar su rechazo por el cambio en la Política Agraria Común (PAC) planteada desde Europa, Martínez rechazaba la posición arancelaria «unilateral» suscrita este pasado fin de semana y sospechaba que la «letra pequeña estará cargada de obligaciones y muy poquitos derechos» suscribiendo las palabras que había escuchado por la mañana en boca del gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá: «Hay que leer mucho y muy despacio la letra pequeña», señaló. Al respecto, y según las declaraciones recogidas por Ical, «se conocen los grandes titulares, del matón de colegio, que nos conformamos que nos dé cinco golpes porque nos iba a dar diez», pero aseguró que «no gusta nada ese 15 por ciento. Es una imposición y no podemos estar a favor», dijo.En todo caso, expuso que «llueve sobre mojado», porque a la reducción del presupuesto comunitario, el aumento en armas y energía, ahora se suma que la «UE está perdiendo su peso específico».Noticia Relacionada estandar No Las reacciones al acuerdo de EE.UU. con la Unión Europea claudia t. ferrero El gobernador del Banco de España prevé un efecto «moderado» de los aranceles en nuestro país, pero teme las cláusulas del pacto comercialPor su parte, las cuatro organizaciones agrarias no dudaron en rechazar con palabras gruesas el acuerdo. Así, el presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo, recordó que la Comunidad exporta productos agroalimentarios al país norteamericano por valor de 150 millones de euros, qu e a partir de ahora «pagarán 22,5 millones al Gobierno de Trump por estos aranceles. Y mientras, lo que viene aquí, ¿cuánto pagará? ¿cero? Además, son de peor calidad y entrarán a bajo precio porque no tiene ningún impuesto». «Nosotros le habíamos pedido a Von der Leyen que no aceptara aranceles, y si los había, que se actuara con la misma contundencia. Solo es fuerte con los débiles, los agricultores y ganaderos», criticó.En la misma línea, el coordinador de la UCCL, Jesús Manuel González Palacín, recordó que Europa «lleva más de 25 años desmantelando las políticas proteccionistas» y consideró que «no podemos ir al son que toque Estados Unidos. Europa debe definir su política y saber con qué reglas de juego jugamos. Es algo más serio que decidirlo entre hoyo y hoyo en un campo de golf», afeó en referencia a que el acuerdo se suscribió en el campo de golf escocés propiedad de Trump.El secretario autonómico de UPA, Aurelio González, por su parte, advirtió del «alto peligro» que tienen estos aranceles, porque vaticinó que «se bajarán más los precios». Por último, el coordinar de COAG, Lorenzo Rivera, invitó a los grupos parlamentarios en Bruselas a «parar esto y el acuerdo Mercosur». Consideró asimismo que este acuerdo «da la razón al tonto de la política, que se aprovecha -añadió- de dos guerras». Al respecto, expuso que «el amigo americano ahora mismo es el enemigo. Trump se ha salido con la suya». RSS de noticias de espana
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