En teoría iba a ser una charla serena, lejos de la crispación que suele darse en el Parlamento de Andalucía. Era un debate celebrado en los cursos de verano de la Universidad Pablo de Olavide en Carmona. Pero salió el tema de la corrupción y con eso bastó para que el debate se incendiara. Bajo el título ‘La Andalucía del presente y futuro’ habían sido convocados los portavoces de los distintos grupos parlamentarios que se dieron cita en un foro que pretendía ser reposado pero que terminó dejando una noticia de primera: los socialistas andaluces se desmarcan de la corrupción y ya no ponen la mano en el fuego por su líder, Pedro Sánchez.El moderador del debate, el director de ABC de Sevilla, Alberto García Reyes, lanzó una pregunta clara y directa. ¿Pondrían la mano en el fuego por Pedro Sánchez?«. Y la respuesta fue demoledora. Ninguno lo hizo. NI siquiera el portavoz adjunto del PSOE andaluz, Rafael Recio, quien reconoció que no pone la mano en el fuego por nadie. Se desmarcaba así del presidente del Gobierno.Si fue un ataque de sinceridad o una advertencia clara es algo que se desconoce, pero el número dos de los socialista en el Parlamento andaluz lo dejó muy claro.La problemática situación de sucesivos escándalos llevó al moderador a preguntar por el bochornoso espectáculo que está atravesando la política nacional con los diferentes casos que cercan a los socialistas. «¿Qué tiene que pasar para corregir esta situación?», les preguntó a los políticos.Ahí, el portavoz del PP, Toni Martín contestó comparando la situación actual con el hundimiento del Titanic y denunciado los ataques a la libertad judicial o la prensa. Según el PP, aún no se sabe «hasta dónde llega la corrupción», por lo que es necesario dar paso a los ciudadanos y que haya elecciones generales. Una petición que ya no sólo hacen los populares. «No lo digo yo. Lo dicen hasta socios del PSOE», recordó Martín insistiendo en su petición de adelanto electoral, que el próximo gobierno «lo decidirán los españoles» y que no se puede dejar de convocar elecciones por miedo a perderlas.El socialista Rafael Recio tuvo que salir del paso en tan difícil trance como pudo. Reconoció que la corrupción es algo que «siempre está presente» en el sistema de la democracia desde que arrancó y que víctimas de esas deficiencias han sido tanto el PSOE como el PP. «He conocido a muchos concejales del PP honestos. Ni el PSOE ni el PP son partidos corruptos», recalcó.Pero también insistió en la necesidad de atajar el problema que está «desde el inicio de la democracia» aunque en este caso le ha tocado al PSOE. «Parece que hay un escenario grave de corrupción y tenemos que actuar», admitió recordando aquellos tiempos anteriores cuando la corrupción afectó al PP.Pero además el socialista también dio un paso más admitiendo que se trata de un escenario de «machismo corrupto» que le avergüenza y rompió una lanza para defender «las ideas» del PSOE. «Por mucho dirigente corrupto, el PSOE va a estar ahí, aunque ocurra esto», señaló Recio insistiendo en que los socialistas quieren que se depuren responsabilidades.Fue el momento en el que el tono sereno se encendió. Sobre todo cuando el portavoz de Vox dijo que no se trata de una única persona corrupta y coincidió con el PP en que «España es como el Titanic». Luego tomó distancia y se preguntó «por qué la banda sigue tocando» y retó al PP a prestarle diputados para una moción de censura contra Sánchez.ImplacablesInmaculada Nieto, de Por Andalucía, dijo que muchos tienen la sensación de que es mejor que todo siga igual y sigue sin resolverse «el enorme problema de la corrupción» . José Ignacio García, de Adelante Andalucía, pidió «no poner paños calientes» y fue autocrítico. «La gente de izquierda debemos saber que no se pueden poner paños calientes. Este gobierno levantó expectativas y ahora hay una profunda decepción», admitió. Y exigió ser implacables con los que se corrompen pero también con las empresas corruptoras. Luego, además de apuntar el tema de los contratos del SAS, señaló soluciones como la limitación de mandatos de los políticos.El debate resultó de lo más entretenido. Sobre todo cuando García Reyes pidió a los políticos que dieran una idea sobre lo peor y lo mejor de la Junta de Andalucía de Juanma Moreno. ¿Lo peor? Para Vox, todo. Para Inmaculada Nieto, la «soberbia con la que gestiona la mayoría absoluta», para el PP que, pese al esfuerzo de inversiones que se hace en sanidad, no está dando resultados y hay que mejorar la situación. El PSOE dijo o que el PP está llevando a cabo una «gestión mercantilista» y José Ignacio García que se lanza el mensaje a los ciudadanos de que «tanto tienes tanto vales».Lo mejor de Juanma Moreno? Según Vox, en la Junta «son los magos de la comunicación», Ignacio García cree que Juanma Moreno es «un personaje bien construido», el PSOE que tienen «virtuosismo en el autobombo» y el PP los datos del paro e indicadores económicos que demuestran que se ha cogido «la vía correcta». Para Nieto la Junta en la pandemia «estuvo a la altura». Temas como la política internacional, vivienda, sanidad o cultura también se trataron. Pero fueron eclipsados por el reconocimiento del PSOE andaluz de que ya no cree a ciegas en su jefe. En teoría iba a ser una charla serena, lejos de la crispación que suele darse en el Parlamento de Andalucía. Era un debate celebrado en los cursos de verano de la Universidad Pablo de Olavide en Carmona. Pero salió el tema de la corrupción y con eso bastó para que el debate se incendiara. Bajo el título ‘La Andalucía del presente y futuro’ habían sido convocados los portavoces de los distintos grupos parlamentarios que se dieron cita en un foro que pretendía ser reposado pero que terminó dejando una noticia de primera: los socialistas andaluces se desmarcan de la corrupción y ya no ponen la mano en el fuego por su líder, Pedro Sánchez.El moderador del debate, el director de ABC de Sevilla, Alberto García Reyes, lanzó una pregunta clara y directa. ¿Pondrían la mano en el fuego por Pedro Sánchez?«. Y la respuesta fue demoledora. Ninguno lo hizo. NI siquiera el portavoz adjunto del PSOE andaluz, Rafael Recio, quien reconoció que no pone la mano en el fuego por nadie. Se desmarcaba así del presidente del Gobierno.Si fue un ataque de sinceridad o una advertencia clara es algo que se desconoce, pero el número dos de los socialista en el Parlamento andaluz lo dejó muy claro.La problemática situación de sucesivos escándalos llevó al moderador a preguntar por el bochornoso espectáculo que está atravesando la política nacional con los diferentes casos que cercan a los socialistas. «¿Qué tiene que pasar para corregir esta situación?», les preguntó a los políticos.Ahí, el portavoz del PP, Toni Martín contestó comparando la situación actual con el hundimiento del Titanic y denunciado los ataques a la libertad judicial o la prensa. Según el PP, aún no se sabe «hasta dónde llega la corrupción», por lo que es necesario dar paso a los ciudadanos y que haya elecciones generales. Una petición que ya no sólo hacen los populares. «No lo digo yo. Lo dicen hasta socios del PSOE», recordó Martín insistiendo en su petición de adelanto electoral, que el próximo gobierno «lo decidirán los españoles» y que no se puede dejar de convocar elecciones por miedo a perderlas.El socialista Rafael Recio tuvo que salir del paso en tan difícil trance como pudo. Reconoció que la corrupción es algo que «siempre está presente» en el sistema de la democracia desde que arrancó y que víctimas de esas deficiencias han sido tanto el PSOE como el PP. «He conocido a muchos concejales del PP honestos. Ni el PSOE ni el PP son partidos corruptos», recalcó.Pero también insistió en la necesidad de atajar el problema que está «desde el inicio de la democracia» aunque en este caso le ha tocado al PSOE. «Parece que hay un escenario grave de corrupción y tenemos que actuar», admitió recordando aquellos tiempos anteriores cuando la corrupción afectó al PP.Pero además el socialista también dio un paso más admitiendo que se trata de un escenario de «machismo corrupto» que le avergüenza y rompió una lanza para defender «las ideas» del PSOE. «Por mucho dirigente corrupto, el PSOE va a estar ahí, aunque ocurra esto», señaló Recio insistiendo en que los socialistas quieren que se depuren responsabilidades.Fue el momento en el que el tono sereno se encendió. Sobre todo cuando el portavoz de Vox dijo que no se trata de una única persona corrupta y coincidió con el PP en que «España es como el Titanic». Luego tomó distancia y se preguntó «por qué la banda sigue tocando» y retó al PP a prestarle diputados para una moción de censura contra Sánchez.ImplacablesInmaculada Nieto, de Por Andalucía, dijo que muchos tienen la sensación de que es mejor que todo siga igual y sigue sin resolverse «el enorme problema de la corrupción» . José Ignacio García, de Adelante Andalucía, pidió «no poner paños calientes» y fue autocrítico. «La gente de izquierda debemos saber que no se pueden poner paños calientes. Este gobierno levantó expectativas y ahora hay una profunda decepción», admitió. Y exigió ser implacables con los que se corrompen pero también con las empresas corruptoras. Luego, además de apuntar el tema de los contratos del SAS, señaló soluciones como la limitación de mandatos de los políticos.El debate resultó de lo más entretenido. Sobre todo cuando García Reyes pidió a los políticos que dieran una idea sobre lo peor y lo mejor de la Junta de Andalucía de Juanma Moreno. ¿Lo peor? Para Vox, todo. Para Inmaculada Nieto, la «soberbia con la que gestiona la mayoría absoluta», para el PP que, pese al esfuerzo de inversiones que se hace en sanidad, no está dando resultados y hay que mejorar la situación. El PSOE dijo o que el PP está llevando a cabo una «gestión mercantilista» y José Ignacio García que se lanza el mensaje a los ciudadanos de que «tanto tienes tanto vales».Lo mejor de Juanma Moreno? Según Vox, en la Junta «son los magos de la comunicación», Ignacio García cree que Juanma Moreno es «un personaje bien construido», el PSOE que tienen «virtuosismo en el autobombo» y el PP los datos del paro e indicadores económicos que demuestran que se ha cogido «la vía correcta». Para Nieto la Junta en la pandemia «estuvo a la altura». Temas como la política internacional, vivienda, sanidad o cultura también se trataron. Pero fueron eclipsados por el reconocimiento del PSOE andaluz de que ya no cree a ciegas en su jefe. En teoría iba a ser una charla serena, lejos de la crispación que suele darse en el Parlamento de Andalucía. Era un debate celebrado en los cursos de verano de la Universidad Pablo de Olavide en Carmona. Pero salió el tema de la corrupción y con eso bastó para que el debate se incendiara. Bajo el título ‘La Andalucía del presente y futuro’ habían sido convocados los portavoces de los distintos grupos parlamentarios que se dieron cita en un foro que pretendía ser reposado pero que terminó dejando una noticia de primera: los socialistas andaluces se desmarcan de la corrupción y ya no ponen la mano en el fuego por su líder, Pedro Sánchez.El moderador del debate, el director de ABC de Sevilla, Alberto García Reyes, lanzó una pregunta clara y directa. ¿Pondrían la mano en el fuego por Pedro Sánchez?«. Y la respuesta fue demoledora. Ninguno lo hizo. NI siquiera el portavoz adjunto del PSOE andaluz, Rafael Recio, quien reconoció que no pone la mano en el fuego por nadie. Se desmarcaba así del presidente del Gobierno.Si fue un ataque de sinceridad o una advertencia clara es algo que se desconoce, pero el número dos de los socialista en el Parlamento andaluz lo dejó muy claro.La problemática situación de sucesivos escándalos llevó al moderador a preguntar por el bochornoso espectáculo que está atravesando la política nacional con los diferentes casos que cercan a los socialistas. «¿Qué tiene que pasar para corregir esta situación?», les preguntó a los políticos.Ahí, el portavoz del PP, Toni Martín contestó comparando la situación actual con el hundimiento del Titanic y denunciado los ataques a la libertad judicial o la prensa. Según el PP, aún no se sabe «hasta dónde llega la corrupción», por lo que es necesario dar paso a los ciudadanos y que haya elecciones generales. Una petición que ya no sólo hacen los populares. «No lo digo yo. Lo dicen hasta socios del PSOE», recordó Martín insistiendo en su petición de adelanto electoral, que el próximo gobierno «lo decidirán los españoles» y que no se puede dejar de convocar elecciones por miedo a perderlas.El socialista Rafael Recio tuvo que salir del paso en tan difícil trance como pudo. Reconoció que la corrupción es algo que «siempre está presente» en el sistema de la democracia desde que arrancó y que víctimas de esas deficiencias han sido tanto el PSOE como el PP. «He conocido a muchos concejales del PP honestos. Ni el PSOE ni el PP son partidos corruptos», recalcó.Pero también insistió en la necesidad de atajar el problema que está «desde el inicio de la democracia» aunque en este caso le ha tocado al PSOE. «Parece que hay un escenario grave de corrupción y tenemos que actuar», admitió recordando aquellos tiempos anteriores cuando la corrupción afectó al PP.Pero además el socialista también dio un paso más admitiendo que se trata de un escenario de «machismo corrupto» que le avergüenza y rompió una lanza para defender «las ideas» del PSOE. «Por mucho dirigente corrupto, el PSOE va a estar ahí, aunque ocurra esto», señaló Recio insistiendo en que los socialistas quieren que se depuren responsabilidades.Fue el momento en el que el tono sereno se encendió. Sobre todo cuando el portavoz de Vox dijo que no se trata de una única persona corrupta y coincidió con el PP en que «España es como el Titanic». Luego tomó distancia y se preguntó «por qué la banda sigue tocando» y retó al PP a prestarle diputados para una moción de censura contra Sánchez.ImplacablesInmaculada Nieto, de Por Andalucía, dijo que muchos tienen la sensación de que es mejor que todo siga igual y sigue sin resolverse «el enorme problema de la corrupción» . José Ignacio García, de Adelante Andalucía, pidió «no poner paños calientes» y fue autocrítico. «La gente de izquierda debemos saber que no se pueden poner paños calientes. Este gobierno levantó expectativas y ahora hay una profunda decepción», admitió. Y exigió ser implacables con los que se corrompen pero también con las empresas corruptoras. Luego, además de apuntar el tema de los contratos del SAS, señaló soluciones como la limitación de mandatos de los políticos.El debate resultó de lo más entretenido. Sobre todo cuando García Reyes pidió a los políticos que dieran una idea sobre lo peor y lo mejor de la Junta de Andalucía de Juanma Moreno. ¿Lo peor? Para Vox, todo. Para Inmaculada Nieto, la «soberbia con la que gestiona la mayoría absoluta», para el PP que, pese al esfuerzo de inversiones que se hace en sanidad, no está dando resultados y hay que mejorar la situación. El PSOE dijo o que el PP está llevando a cabo una «gestión mercantilista» y José Ignacio García que se lanza el mensaje a los ciudadanos de que «tanto tienes tanto vales».Lo mejor de Juanma Moreno? Según Vox, en la Junta «son los magos de la comunicación», Ignacio García cree que Juanma Moreno es «un personaje bien construido», el PSOE que tienen «virtuosismo en el autobombo» y el PP los datos del paro e indicadores económicos que demuestran que se ha cogido «la vía correcta». Para Nieto la Junta en la pandemia «estuvo a la altura». Temas como la política internacional, vivienda, sanidad o cultura también se trataron. Pero fueron eclipsados por el reconocimiento del PSOE andaluz de que ya no cree a ciegas en su jefe. RSS de noticias de espana/andalucia
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