<p>La guerra comercial que está impulsando <strong>Donald Trump</strong> está provocando un seísmo en todo el mundo. Las conversaciones entre los líderes mundiales están condicionadas por los pasos y decisiones que toma el presidente de <strong>EEUU</strong>. La última, su reciente anuncio de imponer aranceles del 30% a productos europeos a partir del 1 de agosto. <strong>Pedro Sánchez</strong> protagoniza esta semana una gira por Latinoamérica, visitando <strong>Chile</strong>, <strong>Uruguay </strong>y <strong>Paraguay</strong>. La parada en estos dos últimos países tiene un marcado acento económico, abrir nuevas oportunidades a las empresas españolas, estrechar lazos económicas y dar un impulso al acuerdo UE-Mercosur, que no está ratificado y que cuenta con la oposición firme de países como Francia.</p>
La guerra comercial que está impulsando Donald Trump está provocando un seísmo en todo el mundo. Las conversaciones entre los líderes mundiales están condiciona
<p>La guerra comercial que está impulsando <strong>Donald Trump</strong> está provocando un seísmo en todo el mundo. Las conversaciones entre los líderes mundiales están condicionadas por los pasos y decisiones que toma el presidente de <strong>EEUU</strong>. La última, su reciente anuncio de imponer aranceles del 30% a productos europeos a partir del 1 de agosto. <strong>Pedro Sánchez</strong> protagoniza esta semana una gira por Latinoamérica, visitando <strong>Chile</strong>, <strong>Uruguay </strong>y <strong>Paraguay</strong>. La parada en estos dos últimos países tiene un marcado acento económico, abrir nuevas oportunidades a las empresas españolas, estrechar lazos económicas y dar un impulso al acuerdo UE-Mercosur, que no está ratificado y que cuenta con la oposición firme de países como Francia.</p>
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