<p>Los Ángeles, erigido desde hace una semana en epicentro de la oposición al gobierno de Donald Trump, no defraudó. Decenas de miles de personas se echaron a las calles en distintas partes de la ciudad para intentar amargarle el cumpleaños al republicano y protestar contra el devenir autoritario de su administración. <strong>Hubo cánticos, lágrimas, orquestas ambulantes,</strong> creatividad a raudales en el desfile infinito de carteles contra Trump y un buen de número de vendedores latinos desafiando el miedo a las <a href=»https://www.elmundo.es/internacional/2025/06/12/684a5fadfdddff58958b458e.html»>redadas de los agentes de inmigración</a>. «Estamos aquí y nadie nos va echar», decía a El Mundo Efraín González mientras despachaba perritos calientes «a la mexicana», justo delante de un inmenso río de manifestantes. «Se siente bien que nos estén apoyando».</p>
Las protestas se produjeron en más de 2.000 localidades de todo el país coincidiendo con el desfile militar organizado por Trump en el día de su cumpleaños
<p>Los Ángeles, erigido desde hace una semana en epicentro de la oposición al gobierno de Donald Trump, no defraudó. Decenas de miles de personas se echaron a las calles en distintas partes de la ciudad para intentar amargarle el cumpleaños al republicano y protestar contra el devenir autoritario de su administración. <strong>Hubo cánticos, lágrimas, orquestas ambulantes,</strong> creatividad a raudales en el desfile infinito de carteles contra Trump y un buen de número de vendedores latinos desafiando el miedo a las <a href=»https://www.elmundo.es/internacional/2025/06/12/684a5fadfdddff58958b458e.html»>redadas de los agentes de inmigración</a>. «Estamos aquí y nadie nos va echar», decía a El Mundo Efraín González mientras despachaba perritos calientes «a la mexicana», justo delante de un inmenso río de manifestantes. «Se siente bien que nos estén apoyando».</p>
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