Se acabó . La directiva del Sevilla , encabezada por José María del Nido , su presidente, ha roto todos los puentes posibles con su vecino en la capital de Andalucía, el Betis , después de una serie de episodios en los dos últimos meses entre los clubes sevillanos que han provocado esta postura sin vuelta de hoja del lado nervionense. La sanción del pasado sábado frente al Celta de tres jugadores del primer equipo sevillista , que coincidía con la despedida del Sánchez-Pizjuán de Jesús Navas, ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia entre los mandatarios del Sevilla, que entienden que su eterno rival «ha transgredido unos códigos mínimos» entre clubes, más aún siendo de la misma ciudad.En el Betis, por contra, y tras las declaraciones que realizó su presidente a la finalización de la Junta de Accionistas celebrada en la tarde del martes, entienden que fue el Sevilla quien superó negativamente cualquier límite de educación o cordialidad no castigando o disculpándose por el símbolo exhibido por Isaac Romero, Juanlu y Carmona tras la disputa del derbi de octubre en el Sánchez-Pizjuán. ¿Qué significa una ruptura de relaciones entre dos entidades? Es el Sevilla quien la ha roto, pues el Betis no va a realizar nuevas declaraciones e invitará a su entidad rival en lo futbolístico, primeramente, al derbi que disputan mañana los filiales en la Ciudad Deportiva Luis del Sol , para después cursar una nueva invitación de cara al derbi liguero del mes de marzo. El Sevilla, ya anunció ayer su presidente, a la salida de una visita al hospital Virgen del Rocío, que iba a declinar dichas invitaciones , un paso inestimable en esta nueva relación o pérdida de la misma con la ruptura.AntecentesBetis y Sevilla llevan tiempo viviendo una calma tensa desde el famoso derbi de la Copa del Rey , que terminó con el título del club verdiblanco, donde el jugador del Sevilla Joan Jordán recibió un golpe producido por el lanzamiento de un palo desde la grada. El duelo se aplazó hasta el día siguiente a puerta cerrada , con el enfado de toda la parroquia bética, que veía cómo se le mandaba a casa por culpa de un desaprensivo. En el Betis se entendió que el jugador visitante había enfatizado su malestar para aplazar un duelo donde su equipo tenía muchas bajas. En el bando sevillista se entendió como una provocación todo lo sucedido en la celebración posterior, aunque no hubo denuncia a los jugadores del Betis. Sí de un tifo posterior que recordaba el incidente.«La diferencia es que jugadores y directivos del Betis se han mofado de jugadores del Sevilla tras la victoria de Copa del Rey y no se nos ocurrió denunciar a Guardado, Canales o Borja Iglesias para pedir una sanción deportiva», alertó Del Nido Carrasco. «Han transgredido unos códigos y crean un precedente muy peligroso », añadía. «En el Betis siempre hemos apostado por una rivalidad sana. Hemos demostrado hasta generosidad en muchas ocasiones. En una de ellas el derbi copero donde toda España vio todo lo que pasó. Tendimos la mano sin haber una disculpa de por medio porque entendíamos que debía haber una cordialidad», anticipó Ángel Haro la noche antes, conociendo al dedillo por dónde podía ir el argumentario de su homólogo en Nervión.La relación presidencialLos presidentes de Sevilla y Betis se acusan mutuamente de no haber utilizado una simple llamada para enterrar este problema, pese a que hablaron justo en la mañana después del derbi por un incidente menor, donde Joaquín Caparrós, exentrenador sevillista, tuvo un encontronazo dialéctico con Ángel Haro. «A la mañana siguiente llame a Ángel Haro porque me enteré de discusión con Joaquín Caparrós en el palco del Ramón Sánchez-Pizjuán. Le dije, sin darle importancia al suceso de la bandera en el césped, que si se había sentido incómodo con la discusión, le pedía disculpas», señalaba. «Me dijo que no le diera importancia a lo sucedido en el palco. No me dijo que le hubiera molestado lo de la bandera» , continuaba Del Nido Carrasco, para finaliza con una dura acusación: «No quería unas disculpas, quería hacer daño deportivo a la entidad a la que represento, a mis jugadores. No entiendo es que en frío se quiera hacer daño deportivo. No puedo creerme que no fueran conscientes de la diferencia de denunciar a antiviolencia o a los comités federativos».El presidente del Betis, preguntado por la presumible ruptura de relaciones, y sabiendo que el Sevilla sabía hace tiempo lo de la denuncia del club heliopolitano por la bandera, se escudó en que no recibió ni siquiera «una disculpa». «No he recibido llamadas. Si esto enfadaba me podían llamar», sentenció el dirigente bético. En el Betis entienden que el presidente del Sevilla alargó deliberadamente el conocimiento de la sanción que, supuestamente, estaba en su poder desde el 31 de octubre y que no obligatoriamente debía llevar aparejada partidos de sanción . Incluso la llamada del presidente nervionense se produjo antes de que tuvieran en su poder las imágenes de la celebración de los canteranos del Sevilla. Versiones.La realidad es que Sevilla está más dividida en dos que nunca. Sus dos instituciones deportivas más señeras han puesto sus diferencias por delante de las aficiones. El Sevilla ha roto la baraja. El Betis mira para otro lado siendo la otra parte del mismo problema. Se acabó . La directiva del Sevilla , encabezada por José María del Nido , su presidente, ha roto todos los puentes posibles con su vecino en la capital de Andalucía, el Betis , después de una serie de episodios en los dos últimos meses entre los clubes sevillanos que han provocado esta postura sin vuelta de hoja del lado nervionense. La sanción del pasado sábado frente al Celta de tres jugadores del primer equipo sevillista , que coincidía con la despedida del Sánchez-Pizjuán de Jesús Navas, ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia entre los mandatarios del Sevilla, que entienden que su eterno rival «ha transgredido unos códigos mínimos» entre clubes, más aún siendo de la misma ciudad.En el Betis, por contra, y tras las declaraciones que realizó su presidente a la finalización de la Junta de Accionistas celebrada en la tarde del martes, entienden que fue el Sevilla quien superó negativamente cualquier límite de educación o cordialidad no castigando o disculpándose por el símbolo exhibido por Isaac Romero, Juanlu y Carmona tras la disputa del derbi de octubre en el Sánchez-Pizjuán. ¿Qué significa una ruptura de relaciones entre dos entidades? Es el Sevilla quien la ha roto, pues el Betis no va a realizar nuevas declaraciones e invitará a su entidad rival en lo futbolístico, primeramente, al derbi que disputan mañana los filiales en la Ciudad Deportiva Luis del Sol , para después cursar una nueva invitación de cara al derbi liguero del mes de marzo. El Sevilla, ya anunció ayer su presidente, a la salida de una visita al hospital Virgen del Rocío, que iba a declinar dichas invitaciones , un paso inestimable en esta nueva relación o pérdida de la misma con la ruptura.AntecentesBetis y Sevilla llevan tiempo viviendo una calma tensa desde el famoso derbi de la Copa del Rey , que terminó con el título del club verdiblanco, donde el jugador del Sevilla Joan Jordán recibió un golpe producido por el lanzamiento de un palo desde la grada. El duelo se aplazó hasta el día siguiente a puerta cerrada , con el enfado de toda la parroquia bética, que veía cómo se le mandaba a casa por culpa de un desaprensivo. En el Betis se entendió que el jugador visitante había enfatizado su malestar para aplazar un duelo donde su equipo tenía muchas bajas. En el bando sevillista se entendió como una provocación todo lo sucedido en la celebración posterior, aunque no hubo denuncia a los jugadores del Betis. Sí de un tifo posterior que recordaba el incidente.«La diferencia es que jugadores y directivos del Betis se han mofado de jugadores del Sevilla tras la victoria de Copa del Rey y no se nos ocurrió denunciar a Guardado, Canales o Borja Iglesias para pedir una sanción deportiva», alertó Del Nido Carrasco. «Han transgredido unos códigos y crean un precedente muy peligroso », añadía. «En el Betis siempre hemos apostado por una rivalidad sana. Hemos demostrado hasta generosidad en muchas ocasiones. En una de ellas el derbi copero donde toda España vio todo lo que pasó. Tendimos la mano sin haber una disculpa de por medio porque entendíamos que debía haber una cordialidad», anticipó Ángel Haro la noche antes, conociendo al dedillo por dónde podía ir el argumentario de su homólogo en Nervión.La relación presidencialLos presidentes de Sevilla y Betis se acusan mutuamente de no haber utilizado una simple llamada para enterrar este problema, pese a que hablaron justo en la mañana después del derbi por un incidente menor, donde Joaquín Caparrós, exentrenador sevillista, tuvo un encontronazo dialéctico con Ángel Haro. «A la mañana siguiente llame a Ángel Haro porque me enteré de discusión con Joaquín Caparrós en el palco del Ramón Sánchez-Pizjuán. Le dije, sin darle importancia al suceso de la bandera en el césped, que si se había sentido incómodo con la discusión, le pedía disculpas», señalaba. «Me dijo que no le diera importancia a lo sucedido en el palco. No me dijo que le hubiera molestado lo de la bandera» , continuaba Del Nido Carrasco, para finaliza con una dura acusación: «No quería unas disculpas, quería hacer daño deportivo a la entidad a la que represento, a mis jugadores. No entiendo es que en frío se quiera hacer daño deportivo. No puedo creerme que no fueran conscientes de la diferencia de denunciar a antiviolencia o a los comités federativos».El presidente del Betis, preguntado por la presumible ruptura de relaciones, y sabiendo que el Sevilla sabía hace tiempo lo de la denuncia del club heliopolitano por la bandera, se escudó en que no recibió ni siquiera «una disculpa». «No he recibido llamadas. Si esto enfadaba me podían llamar», sentenció el dirigente bético. En el Betis entienden que el presidente del Sevilla alargó deliberadamente el conocimiento de la sanción que, supuestamente, estaba en su poder desde el 31 de octubre y que no obligatoriamente debía llevar aparejada partidos de sanción . Incluso la llamada del presidente nervionense se produjo antes de que tuvieran en su poder las imágenes de la celebración de los canteranos del Sevilla. Versiones.La realidad es que Sevilla está más dividida en dos que nunca. Sus dos instituciones deportivas más señeras han puesto sus diferencias por delante de las aficiones. El Sevilla ha roto la baraja. El Betis mira para otro lado siendo la otra parte del mismo problema. Se acabó . La directiva del Sevilla , encabezada por José María del Nido , su presidente, ha roto todos los puentes posibles con su vecino en la capital de Andalucía, el Betis , después de una serie de episodios en los dos últimos meses entre los clubes sevillanos que han provocado esta postura sin vuelta de hoja del lado nervionense. La sanción del pasado sábado frente al Celta de tres jugadores del primer equipo sevillista , que coincidía con la despedida del Sánchez-Pizjuán de Jesús Navas, ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia entre los mandatarios del Sevilla, que entienden que su eterno rival «ha transgredido unos códigos mínimos» entre clubes, más aún siendo de la misma ciudad.En el Betis, por contra, y tras las declaraciones que realizó su presidente a la finalización de la Junta de Accionistas celebrada en la tarde del martes, entienden que fue el Sevilla quien superó negativamente cualquier límite de educación o cordialidad no castigando o disculpándose por el símbolo exhibido por Isaac Romero, Juanlu y Carmona tras la disputa del derbi de octubre en el Sánchez-Pizjuán. ¿Qué significa una ruptura de relaciones entre dos entidades? Es el Sevilla quien la ha roto, pues el Betis no va a realizar nuevas declaraciones e invitará a su entidad rival en lo futbolístico, primeramente, al derbi que disputan mañana los filiales en la Ciudad Deportiva Luis del Sol , para después cursar una nueva invitación de cara al derbi liguero del mes de marzo. El Sevilla, ya anunció ayer su presidente, a la salida de una visita al hospital Virgen del Rocío, que iba a declinar dichas invitaciones , un paso inestimable en esta nueva relación o pérdida de la misma con la ruptura.AntecentesBetis y Sevilla llevan tiempo viviendo una calma tensa desde el famoso derbi de la Copa del Rey , que terminó con el título del club verdiblanco, donde el jugador del Sevilla Joan Jordán recibió un golpe producido por el lanzamiento de un palo desde la grada. El duelo se aplazó hasta el día siguiente a puerta cerrada , con el enfado de toda la parroquia bética, que veía cómo se le mandaba a casa por culpa de un desaprensivo. En el Betis se entendió que el jugador visitante había enfatizado su malestar para aplazar un duelo donde su equipo tenía muchas bajas. En el bando sevillista se entendió como una provocación todo lo sucedido en la celebración posterior, aunque no hubo denuncia a los jugadores del Betis. Sí de un tifo posterior que recordaba el incidente.«La diferencia es que jugadores y directivos del Betis se han mofado de jugadores del Sevilla tras la victoria de Copa del Rey y no se nos ocurrió denunciar a Guardado, Canales o Borja Iglesias para pedir una sanción deportiva», alertó Del Nido Carrasco. «Han transgredido unos códigos y crean un precedente muy peligroso », añadía. «En el Betis siempre hemos apostado por una rivalidad sana. Hemos demostrado hasta generosidad en muchas ocasiones. En una de ellas el derbi copero donde toda España vio todo lo que pasó. Tendimos la mano sin haber una disculpa de por medio porque entendíamos que debía haber una cordialidad», anticipó Ángel Haro la noche antes, conociendo al dedillo por dónde podía ir el argumentario de su homólogo en Nervión.La relación presidencialLos presidentes de Sevilla y Betis se acusan mutuamente de no haber utilizado una simple llamada para enterrar este problema, pese a que hablaron justo en la mañana después del derbi por un incidente menor, donde Joaquín Caparrós, exentrenador sevillista, tuvo un encontronazo dialéctico con Ángel Haro. «A la mañana siguiente llame a Ángel Haro porque me enteré de discusión con Joaquín Caparrós en el palco del Ramón Sánchez-Pizjuán. Le dije, sin darle importancia al suceso de la bandera en el césped, que si se había sentido incómodo con la discusión, le pedía disculpas», señalaba. «Me dijo que no le diera importancia a lo sucedido en el palco. No me dijo que le hubiera molestado lo de la bandera» , continuaba Del Nido Carrasco, para finaliza con una dura acusación: «No quería unas disculpas, quería hacer daño deportivo a la entidad a la que represento, a mis jugadores. No entiendo es que en frío se quiera hacer daño deportivo. No puedo creerme que no fueran conscientes de la diferencia de denunciar a antiviolencia o a los comités federativos».El presidente del Betis, preguntado por la presumible ruptura de relaciones, y sabiendo que el Sevilla sabía hace tiempo lo de la denuncia del club heliopolitano por la bandera, se escudó en que no recibió ni siquiera «una disculpa». «No he recibido llamadas. Si esto enfadaba me podían llamar», sentenció el dirigente bético. En el Betis entienden que el presidente del Sevilla alargó deliberadamente el conocimiento de la sanción que, supuestamente, estaba en su poder desde el 31 de octubre y que no obligatoriamente debía llevar aparejada partidos de sanción . Incluso la llamada del presidente nervionense se produjo antes de que tuvieran en su poder las imágenes de la celebración de los canteranos del Sevilla. Versiones.La realidad es que Sevilla está más dividida en dos que nunca. Sus dos instituciones deportivas más señeras han puesto sus diferencias por delante de las aficiones. El Sevilla ha roto la baraja. El Betis mira para otro lado siendo la otra parte del mismo problema. RSS de noticias de deportes
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